Acerca de la autora

22 feb 2012

Memorias de Crímenes (Sorprendida por una noticia anunciada)


































Tengo una lista de libros que me encantaría leer. Son clásicos de siempre como Moby Dick, Drácula o Un mundo feliz. Sin embargo, cuando voy a la biblioteca no soporto la tentación de escoger ese libro viejo y apartado que no había sido tocado desde el 2009.

"Un libro abierto es un cerebro que habla
cerrado un amigo que espera
olvidado, un alma que perdona
destruido, un corazón que llora."
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Memoria de Crímenes es el título de un libro de historias policíacas de Ray Bradbury que según me acabo de informar, gracias a sedice.com

durante sus inicios. En mi opinión los cuentos que leí salen un poco de lo criminal y van a un realismo tenebroso que me recuerda una historia de fantasmas de Juan Rulfo. Son cosas que parecen imposibles, pero que suceden. Como la persona que nunca crees que podría enarmorarse de ti hasta que te lo dice; el amigo que ves después de tantos años o la persona que al confiar en ella, te falla.
Volviendo al caso de Brad, narra sucesos que bajos circunstancias muy especiales..., por qué no? Como el bebé que enloquece a sus padres hasta la muerte en "el pequeño asesino", un niño engañado por su familia en "la señora del baúl", o un hombre toreado hasta la muerte en "la calavera de azúcar".
"Muere un hombre cuidadoso", por ejemplo, es un escritor hemofílico asesinado por quien ÉL (no los lectores) menos se lo espera: su ex-novia. Quien para evitar el lanzamiento de una obra con su persona como la drogadicta protagonista, lo acuchilla en la playa, bajo efectos fármacos. Quedando para siempre sobre la arena caliente.
La forma de narrar de este autor, te hace sospechar de todos los personajes, atinando algunas veces, pero nunca en el modus operandi. Me recuerda a Agatha!
Y un detalle, lo más elaborado y fríamente calculado de estos cuentos, son los títulos. Como la vida, lo ves todo pero te sorprende lo inesperado.

Imagen de http://lolasantoangel.blogspot.com

13 feb 2012

La naranja mecánica (El corazón mecánico)

La naranja mecánica ( Anthony Burgess)


Si a partir de la expresión del rostro deduces alguna emoción o pensamiento negativo..esto es lo que encontrarás a lo largo del libro. La naranja mecánica es uno de esos libros que destruyen infancias; los hechos narrados no son para mentes cualesquiera. Pero esto fue en 1962, hoy día ya no hay corazones sensibles. Enciende el televisor, lee las noticias, prende el computador o sal a la calle, lo que verás no es sino para seres acostumbrados a la miseria del espíritu y al dolor. Pero aquí entre nos, no me gustaría vivir en los tiempos de la naranja mecánica, no por la época; sino por personas como Alex, el protagonista, un muchacho acostumbracho a violar, agredir, robar y todo lo malo que puedas imaginar en un individuo de la sociedad. Lo curioso de Alex, es que es un personaje que tomas tanto odio , y en la segunda parte guardas empatía.. como si Burguess estaba jugando con nuestros sentimientos, pero es así. Yo tenía la esperanza de que pagara con la sociedad y volviese una mejor persona.

El capítulo 21 de esta obra, no fue representada en la película homónima candidata al Óscar en 1971. Alex fue sujeto de un proceso de reformación psicológica. Al final, el solo pensamiento de matar una moscar le producía náuseas; sensación acrecendada cuando escuchaba música, el único placer decente de este personaje. El capítulo 21 relata el accidente que sufre Alex el cual lo regresa al mismo estado mental de antes.

La naranja mecánica proviene de una dicho inglés que se refiere a cosas imposibles. Hoy día tenemos corazones mecánicos, que tenemos que darle cuerda para que sigan latiendo. Porque hemos perdido la sensibilidad hacia lo que humano.

Espero no tener pesadillas con este personaje, que sinceramente me pertuba; pero tal como están las cosas, si miras bien la imagen, pues que su mirada también refleje el estado de tu corazón...tu corazón mecánico.

2 feb 2012

El recuerdo del chivo

La fiesta del chivo- Mario Vargas Llosa

Mucha gente dijo "era justo!" cuando Vargas Llosa recibió el nobel de literatura. Cuando leemos la fiesta del chivo , tenemos tres historias, los recuerdos rencorosos de Urania, la espera de los complotados, y las últimas 2 semanas de Trujillo. Yo leí una cuarta que aguzó mis sentidos. No se si habrán notado pero soy dominicana; no de esos dominicanos que solo piensan en merengue y en presidente, sino de aquellas que piensan como Konrad Adenauer "La historia es la suma total de todas aquellas cosas que hubieran podido evitarse". Me adentré tanto en esta historia que por momentos me olvidé de que era un obra ficticia en parte.
Y no fue como esos libros del Gabito que devoro con ferocidad para ver en que termina, esta vez digerí hoja por hoja tardándome casi el triple del tiempo que le dedico a un libro de este tamaño.
Las calles de mi ciudad ya no serán las mismas, seran revividas por el recuerdo. Veré en la avenida cerca de casa, la ruta por donde el tirano hacía sus paseos al atardecer. Veré las casas de época pensando si sus habitantes fueron arrastrados por los caliés, y pensaré al aprenderme los nombres de las calles, ¿qué tanto perdió aquel desdichado personaje?, que la historia solo pudo compesarlo con un título en obras públicas.

Me pregunto cuando murió el amor por la patria de estos ciudadanos del mundo. No quiera Dios que haga falta otro Somoza, un nuevo Bautista, un Franco, Stalin, Hitler o Trujillo para sentir en carne viva "hay un país en el mundo" y oler la sangre derramada en la tierra del Caribe. Porque ahora, al pasar por el malecón de mi ciudad, se identifican como si fueran mis propios recuerdos, donde el cuerpo del dictador cayó al suelo.

Posdatas!!
Trailer de la película homónima con mi querida Isabella Rosellini como Urania.