Si alguien me hubiese hablado antes de Pedro Ugarte (Ganador del X Premio de Lengua de Trapo de Narrativa) (2004).. Muy pocas veces un escritor que sitúa su historia en este siglo, llama de tal forma mi atención.
Durante la lectura fue difícil no pensar en ese cariño incondicional de mi padre. De no leerlo de las palabras del protagonista, Alberto Durrio; no entendería ese amor inmerecido, ese dolor ajeno y la felicidad robada que evocan el acto, no de engendrar por sí, sino de ser padre.
Este no es un libro para los padres, que se preocuparían de más, ya que la trama gira en torno a la deuda de una familia con el desconocido que salva la vida de su hijo. Este es un libro para los hijos que aún estamos fuertemente arraigados a nuestros progenitores y quienes somos malagradecidos.
Al leer Casi Inocentes, yo me considero culpable de pasar por alto todos los sacrificios, de despreciar las atenciones y no darme cuenta de toda la formación gratuita que he recibido para escribir esta entrada. Desde mi madre quien me enseñó a sostener el lápiz hasta mi padre quien paga el servicio de Internet.
De todas formas, no llega a mi ranking de favoritos por lo poco abarcativo del capítulo del despido, la desidia de Regina y el final inconcluso, al menos para mí respecto al destino de Piort y el matrimonio Durrio.
(Esta es solo una opinión, sea libre de dar también su punto de vista)
Un libro para reflexionar sin lugar a dudas, sin olvidar ese toque thriller a lo Jorge Bucay.
Hey, ahora me entero que hay una película.. http://www.casiinocentes.com/
