Aunque considerado uno de los clásicos de literatura, me confieso no ser fan de la escritura rusa. Su subjetividad y su tratamiento de la mentalidad humana, hace de la lectura en muchas partes tediosa.
El hecho principal es la muerte del patrirca familiar, el señor Karamasof: un hombre egoísta, usurero, pernicioso... una muerte que la verdad no se lamenta mucho pero, siguiendo con la justicia, a alguien hay que acusar. La culpa recae sobre su primogénito.
Dostoievski logra que uno se identifique con la defensa o con el fiscal, según avanza el juicio. Tal vez, por haber definido así mi punto de vista, no me pareció el final. Pues como en el mismo libro se escribe:
"Mejor es perdonar diez culpables que condenar un inocente".
Una lección de vida muy interesante.
PD.- http://www.elconfidencial.com/sociedad/2011/12/09/mas-vale-un-delincuente-en-la-calle-que-un-inocente-en-la-carcel-89036/
